El Banco Central de Egipto mantuvo su tasa de interés sin cambios en un máximo histórico de 27.25% en noviembre de 2024, por el octavo mes consecutivo, reflejando las condiciones económicas globales y domesticas.
La inflación general anual se estabilizó en 26.5% en octubre, mientras que la inflación subyacente se redujo a 24.4%, y la inflación de alimentos cayó a un mínimo de dos años de 27.3%.
Estas tendencias, junto con expectativas de inflación mejoradas y una dinámica de inflación mensual normalizada, apuntan a un camino de desinflación continua, aunque sujeto a ajustes de precios administrados.
El crecimiento del PIB real se aceleró en el tercer trimestre de 2024 en comparación con el 2.4% del segundo trimestre, con más ganancias anticipadas en el cuarto trimestre, aunque la producción sigue por debajo del potencial.
Se espera que la inflación se mantenga cerca de los niveles actuales durante 2024, con riesgos aún inclinados al alza, pero se prevé que disminuya significativamente a partir del primer trimestre de 2025 a medida que el endurecimiento monetario y los efectos de base favorables hagan efecto.