El banco central de Moldavia aumentó su tasa de interés de referencia en 200 puntos básicos hasta el 5.6% durante una reunión no programada el 10 de enero de 2025, alcanzando el nivel más alto desde octubre de 2023, para ajustar su política monetaria a la luz de los recientes aumentos tarifarios.
La decisión sigue a una evaluación del incremento de tarifas en gas, energía térmica y electricidad, los cuales se espera que incrementen los costos de producción y las expectativas de inflación.
Como resultado, el banco central revisó su pronóstico de inflación, prediciendo que la tasa de inflación anual permanecerá por encima del límite superior del rango de variación de ±1.5 puntos porcentuales respecto al objetivo del 5.0% durante varios trimestres de 2025.
El aumento de la tasa busca mitigar los efectos inflacionarios de estos incrementos tarifarios y anclar expectativas con el objetivo de regresar la tasa de precios al consumidor anual dentro del corredor de variación del objetivo de inflación en un marco de tiempo razonable.