El Banco Nacional de Moldavia mantuvo su tasa de interés base en 6.5% durante su reunión de marzo, enfatizando que la postura política actual sigue siendo adecuada para llevar la inflación de vuelta dentro de un rango de ±1.5 puntos porcentuales del objetivo del 5.0% a medio plazo.
Los responsables de la política destacaron el proceso desinflacionario en curso y el impacto continuo de las medidas monetarias restrictivas implementadas recientemente, que todavía están surtiendo efecto en la economía.
En febrero de 2025, la tasa de inflación anual del país se redujo a 8.6% desde el 9.1% en enero, en línea con las previsiones del último Informe de Inflación, principalmente debido a un impacto menor al esperado de las compensaciones en las tarifas eléctricas.
Sin embargo, los responsables de la política señalaron que persisten incertidumbres, especialmente en lo que respecta a la producción agrícola, los ajustes de tarifas de servicios públicos, la necesidad de un estímulo fiscal adecuado para impulsar la actividad económica, la asistencia financiera externa y las tensiones regionales, incluido el impacto de sanciones mutuas y la demanda regional moderada.