El Banco Nacional de Moldavia mantuvo su tasa de interés base sin cambios en 6.5% durante su reunión de abril, manteniendo los costos de endeudamiento en su nivel más alto desde junio de 2023, para anclar las expectativas de inflación y devolver la inflación al rango de ±1.5 puntos porcentuales del objetivo del 5.0% a mediano plazo.
Los últimos datos mostraron que la inflación aumentó a 8.8% en marzo desde 8.6% en febrero, muy por encima del objetivo del banco central, impulsada por tarifas reguladas más altas para gas, calefacción y electricidad, así como aumentos en los precios de los alimentos.
Los choques del lado de la oferta, incluyendo condiciones climáticas adversas y una reducción en la producción agrícola, continuaron afectando a la economía.
Aun así, el banco central señaló que la economía está experimentando presiones desinflacionarias a pesar del alto crecimiento de precios, impulsadas por una débil demanda interna y los efectos rezagados de anteriores ajustes monetarios.
Los responsables de la política también señalaron posibles efectos desinflacionarios debido a la demanda global moderada en medio de las condiciones comerciales de EE.
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