El Banco de Corea (BoK) redujo su tasa base en 25 puntos básicos a 2.75% en la reunión de febrero de 2025, después de mantener la tasa sin cambios en enero.
Esto marcó la tercera reducción en cuatro meses, alineándose con las expectativas del mercado.
La decisión llevó los costos de endeudamiento a su nivel más bajo desde septiembre de 2022, en medio de la continua estabilización de la inflación, la disminución de la deuda de los hogares y el débil crecimiento económico.
Además, el banco central revisó su pronóstico de crecimiento para este año a 1.5%, por debajo del 1.9% del pronóstico de noviembre, debido al impacto de los cambios en la política arancelaria de EE.UU., las situaciones políticas internas y las medidas de estímulo económico del gobierno.
Mientras tanto, los responsables de la política monetaria mantuvieron su pronóstico de inflación estable en 1.9% tanto para este año como para el próximo, y se espera que la tasa de inflación subyacente sea de 1.8%, ligeramente por debajo del pronóstico anterior de 1.9%.
En enero, la inflación anual se aceleró al 2.2% pero se mantuvo cerca del objetivo a medio plazo del BoK del 2%.