La tasa de inflación anual en España se moderó por segundo mes consecutivo hasta el 2,2% en abril de 2025, la más baja en seis meses, aunque ligeramente por encima de las estimaciones del mercado del 2%, mostraron estimaciones preliminares.
La desaceleración se atribuye en gran medida a una caída en los precios del gas, en contraste con el aumento observado en abril de 2024, así como a una caída más pronunciada en los precios de la electricidad en comparación con el mismo mes del año pasado.
Los precios más bajos de los combustibles y lubricantes para vehículos personales también contribuyeron, revirtiendo el aumento registrado en abril de 2024.
Por otro lado, los precios de ocio y cultura experimentaron un notable aumento, después de haber disminuido en el mismo mes del año pasado.
La tasa subyacente, excluyendo elementos volátiles como alimentos y energía, fue del 2,4% en abril, frente al 2% del mes anterior.
En comparación con el mes anterior, el IPC aumentó un 0,6%, tras un aumento del 0,1% en marzo.
Considerando el índice armonizado de la UE, el IPC aumentó un 2,2% en el año, por encima de las previsiones del mercado del 2% y un 0,6% en el mes, mientras que los analistas esperaban un aumento del 0,4%.