El Banco Central de Colombia mantuvo su tasa de referencia en 9.5% en marzo, con cuatro directores apoyando la decisión y tres favoreciendo un recorte de 50 puntos básicos.
La inflación anual, después de mantenerse estable en 5.2% durante tres meses, aumentó ligeramente a 5.3% en febrero, con la inflación subyacente disminuyendo a 4.21%, impulsada por menores precios de procesamiento de alimentos y regulados, aunque los costos de servicios permanecieron elevados en 7%.
El PIB se expandió un 2.4% en el cuarto trimestre, y el ISE de enero mostró un cambio anual del 2.5%, con el equipo técnico elevando su pronóstico de crecimiento para 2025 de 2.6% a 2.8%.
Sin embargo, la volatilidad del tipo de cambio, derivada de condiciones financieras globales más ajustadas, un dólar más fuerte y la incertidumbre fiscal de Colombia, ha aumentado los riesgos inflacionarios, limitando el margen para recortes de tasas agresivos.
El mercado laboral continuó mostrando sólidos registros con un aumento del empleo y una disminución del desempleo.
El banco central enfatizó que las decisiones futuras sobre tasas dependerán de los datos económicos entrantes.