El Consejo de Gobierno del BCE acordó que la política monetaria sigue siendo restrictiva y que es prematuro discutir cuándo será apropiado concluir con recortes de tasas de interés, según relatos de su última reunión.
Un número seleccionado de miembros del cuerpo encargado de establecer la política del banco central se preocuparon de que la inflación de servicios persistente y los precios energéticos más altos aún puedan ser una amenaza, pero otros expresaron mayores preocupaciones sobre el lento crecimiento económico y el riesgo de que una política excesivamente restrictiva pueda llevar al banco central a no cumplir con el objetivo de inflación del 2%, equilibrando los riesgos de política en torno al Consejo.
Aun así, los miembros estuvieron de acuerdo en que el proceso de desinflación sigue en marcha y que los riesgos de crecimiento siguen a la baja, en línea con la visión del mercado de que aún habrá múltiples recortes de tasas por entregar este año.
El BCE redujo sus tasas de interés clave en 25 puntos básicos en la reunión del 25 de enero, como se esperaba.