La tasa de inflación anual en Japón cayó al 3.7% en febrero de 2025 desde un máximo de 2 años del 4.0% en el mes anterior, en medio de una fuerte desaceleración en los precios de la electricidad (9.0% vs 18.0% en enero) y el gas (3.4% vs 6.8%) tras la reinstauración de subsidios energéticos por parte del gobierno.
Además, los precios de los alimentos aumentaron ligeramente más lento después de alcanzar un máximo de 15 meses en enero (7.6% vs 7.8%).
Asimismo, la inflación se moderó para la atención médica (1.7% vs 1.8%), recreación (2.1% vs 2.6%) y artículos misceláneos (1.1% vs 1.4%).
Al mismo tiempo, el costo de la educación continuó cayendo (-1.1% vs -1.1%).
En contraste, la inflación se mantuvo estable para la vivienda (en 0.8%) y la ropa (en 2.8%), mientras que se aceleró para el transporte (2.4% vs 2.0%) y los muebles y artículos del hogar (4.0% vs 3.4%), y se recuperó para las comunicaciones (0.1% vs -0.3%).
La tasa de inflación subyacente bajó al 3.0% desde el máximo de 19 meses de enero del 3.2%, por encima de las previsiones del 2.9%.
Mensualmente, el IPC cayó un 0.1%, la primera caída desde septiembre, después de un aumento del 0.5% en enero.