Los salarios nominales en Japón aumentaron solo un 1% interanual en mayo de 2025, marcando un tercer mes consecutivo de desaceleración y quedando muy por debajo de las expectativas del mercado de un aumento del 2.4%.
Fue el crecimiento más débil desde marzo de 2024, impulsado en gran medida por una caída del 18.7% en los pagos especiales (bonificaciones).
Mientras tanto, los salarios reales, ajustados por inflación y una medida clave del poder adquisitivo del consumidor, cayeron un 2.9%, extendiendo su declive a un quinto mes consecutivo y registrando la mayor caída en casi dos años.
Los datos salariales más amplios aún no reflejan los aumentos salariales récord acordados durante las negociaciones laborales de primavera de este año, ya que muchas empresas más pequeñas y no sindicalizadas son más lentas para implementar aumentos salariales.
El débil crecimiento salarial plantea nuevas preocupaciones sobre las perspectivas económicas de Japón, especialmente en medio de una mayor incertidumbre global tras los nuevos aranceles de EE.
UU.
También complica el camino del Banco de Japón hacia la normalización de la política, ya que los ingresos reales estancados probablemente frenarán el gasto del consumidor y detendrán la recuperación económica más amplia.