El índice del dólar cayó por segunda sesión consecutiva el miércoles, llegando a 102.3 y acercándose a los mínimos de seis meses alcanzados la semana pasada.
Las crecientes preocupaciones sobre el crecimiento global, incluido el riesgo de una recesión en EE.
UU.
desencadenada por las crecientes tensiones comerciales, disminuyeron el sentimiento de los inversores y aumentaron la demanda de monedas tradicionales refugio seguro como el yen japonés y el franco suizo.
El dólar también se vio presionado por una continua venta masiva de bonos del Tesoro de EE.
UU., en medio de especulaciones de que los inversores extranjeros están deshaciendo posiciones en respuesta a la creciente incertidumbre.
La última ola de aranceles recíprocos de EE.
UU., incluido un arancel del 104% sobre las importaciones chinas, entró en vigor oficialmente el miércoles, aumentando los temores de una mayor repercusión económica.